La lluvia ha continuado, aunque todos tenemos la esperanza que para final de semana se aleje de nosotros. Resulta difícil desear esto en nuestra tierra, pero hemos sufrido ya muchos perjuicios y queda todavía aceituna deteriorada y casi podrida por coger. Se han calculado en 930 millones de euros los daños causados por el temporal de diciembre y enero en toda Andalucía. Así por ejemplo en la provincia de Jaén se desglosan 90 millones de euros en infraestructuras y 200 millones en pérdida de aceituna. En la de de Sevilla 103 millones en cúltivos de cítricos, aceituna y hortícolas y en la de Córdoba, tomando datos de primeros de marzo, 250 millones, de ellos 92 de cosecha de olivar, naranja y cereal. Y todo esto tomando sólo como referencia las tres áreas más perjudicadas de la Autonomía, y no habiéndose estimado exactamente todavía los tremendos destrozos en infractutura y cosecha de estas y otras muchas provincias.Todos sabemos que los daños desde enero se han visto grandemente incrementados. En febrero sólo hemos podido salir al campo 9 días y en marzo cinco con enormes dificultades, caminos y tractores sepultados por las aguas.
Se habla de ayudas a la gente que ha tenido que abandonar sus casas y sus enseres. Hay conversaciones con Zapatero al respecto, eso es lo primero, lo primordial, lo que hay que hacer sin dilación alguna, pero también nosotros, todos los agricultores andaluces, al igual que lo están haciendo las asociaciones agrarias, tenemos que empujar. Hay que luchar, siempre luchar. Debemos acudir a nuestros Ayuntamientos con fotos, planos de nuestros destrozos para pedir ayuda, para que vean y comprueben nuestra realidad y para que inmediatamente se publique en el BOE, en el BOJA decretos donde se hable, al menos, de exenciones fiscales, condonaciones de pagos a la Seguridad Social, etc, etc., se declaren nuestras tierras zona catastrófica y se estipule un auténtico y eficaz Plan de Infraestructuras Hidraúlicas, cuyo abandono ha sido, como todos sabemos, una de las grandes causas de estas catástrofes.
Se tiene que hacer justicia con nosotros que, ni siquiera, en muchos casos, podemos entrar en nuestras parcelas. Han desaparecido caminos y veredas. Necesitamos sentirnos protegidos y animados por nuestras Administraciones para seguir luchando siempre con la mirada en el cielo y el sueño del olivo en la retina, de nuestra mirada depende mucha gente y mucha tierra.
Se habla de ayudas a la gente que ha tenido que abandonar sus casas y sus enseres. Hay conversaciones con Zapatero al respecto, eso es lo primero, lo primordial, lo que hay que hacer sin dilación alguna, pero también nosotros, todos los agricultores andaluces, al igual que lo están haciendo las asociaciones agrarias, tenemos que empujar. Hay que luchar, siempre luchar. Debemos acudir a nuestros Ayuntamientos con fotos, planos de nuestros destrozos para pedir ayuda, para que vean y comprueben nuestra realidad y para que inmediatamente se publique en el BOE, en el BOJA decretos donde se hable, al menos, de exenciones fiscales, condonaciones de pagos a la Seguridad Social, etc, etc., se declaren nuestras tierras zona catastrófica y se estipule un auténtico y eficaz Plan de Infraestructuras Hidraúlicas, cuyo abandono ha sido, como todos sabemos, una de las grandes causas de estas catástrofes.
Se tiene que hacer justicia con nosotros que, ni siquiera, en muchos casos, podemos entrar en nuestras parcelas. Han desaparecido caminos y veredas. Necesitamos sentirnos protegidos y animados por nuestras Administraciones para seguir luchando siempre con la mirada en el cielo y el sueño del olivo en la retina, de nuestra mirada depende mucha gente y mucha tierra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario